La Tarea del Spa: Innovarse a sí mismo

“Existe el riesgo de que el SPA se convierta en un servicio con escaso valor añadido y, en términos generales, un servicio más que cualquiera podrá ofrecer y no aporte ninguna ventaja competitiva”

El último trimestre del año, es sin lugar a dudas una de las mejores épocas en que los Spas están rebosantes de clientela. Los masajes básicos y reductivos son los que tienen mayor demanda. Es por ello que el tema de la innovación en cuanto a tratamientos y servicios en general debe ser lo fundamental a trabajar en estos días, así como el trabajo de formación continua, pues está demostrado que los Spas requieren de líderes informados que se modernicen continuamente para responder a las nuevas necesidades de los clientes, así que se deben capacitar continuamente, lo mismo que su personal.

Tenga presente que la innovación es sólo una amenaza si la desarrolla su competencia. El término innovación, que proviene del latín innovatîo, -õnis, significa “acción y efecto de innovar” y/o “creación o modificación de un producto, y de su introducción en un mercado”.

Por tanto, la innovación tiene bastante que ver con un cambio de percepción por parte de un consumidor respecto a un determinado tipo de producto. Sin lugar a dudas, el consumidor o cliente juega aquí un papel fundamental.

En tiempos como estos, lo ideal es que no deje de innovar, incorpore nuevos componentes, servicios integrales, actividades físicas y culturales que proporcionen equilibrio en cuerpo, mente y espíritu; como por ejemplo una sala de lectura, cocina saludable, eventos y conferencias. Procure que su Spa cuente con profesionales y servicios para todo tipo de clientes, ya que existe el riesgo de que éste se convierta en un servicio con escaso valor añadido y en términos generales, un servicio más que cualquiera podrá ofrecer y no aporte ninguna ventaja competitiva.

Es decir, si no se innova se corre el riesgo de que su Spa sea muy uniforme, genérico, clónico, con apenas pocas diferencias; no hay que olvidar la, cada vez mayor, competencia dentro y fuera del sector, precisamente este es el reto y es su gran oportunidad para afrontar las innovaciones.

Sin lugar a dudas, su Spa se puede beneficiar de dicho enfoque si trata el impacto de sus servicios de una manera más ‘holística’ en lugar de quedarse en un nivel organizacional cerrado haciendo las mismas cosas que ha venido haciendo durante las últimas décadas.

Antes de poner en marcha cualquier tipo de innovación, es preciso reflexionar sobre los nuevos contenidos y conceptos relacionados con la salud y el bienestar, para así respondernos lo siguiente:

  1. Soluciones: Qué innovación es la que más me conviene.
  2. Personalizar: Qué concepto quiero y cómo lo “personalizo”.
  3. Adaptar: Cómo lo adapto a mi “concepto”.

Una vez hechas estas reflexiones será mucho más fácil diseñar conceptos creativos y después dimensionar zonas y espacios. Para ello deben dedicar tiempo a analizar y pensar qué tipo de Spa e innovación desea ofrecer a su cliente. En este aspecto debe realizar estudios cualitativos y cuantitativos sobre el usuario final, que lo ayudarán a determinar cómo deber ser y cuánta gente valorará dichos cambios. Otro aspecto a analizar es la propia competencia, es decir, qué competencia tiene y qué trabajo de promociones o innovaciones están llevando a cabo.

Y, por último, tiene que definir una serie de conceptos, tales como: qué producto es el ideal (servicios, tratamientos), qué contenidos y conceptos utilizar, cómo los personaliza, cómo los adapta a su concepto de operación, entre otros. Pero no olvide jamás que ni el tamaño de las instalaciones ni la cantidad de tratamientos será lo que en el futuro dará valor a su Spa, sino la calidad de su diseño operativo, administrativo, conceptual y los servicios.

Ya lo señalaba en su momento John Kao, gurú de la innovación en este tipo de negocios: la innovación requiere de un objetivo claro a seguir y de un estado mental ‘holístico’ que nos permita alcanzar dicho objetivo utilizando diversos canales. En primer lugar, es importante cambiar la óptica cuando se mira la innovación. Según Kao, “las sociedades no están primordialmente enfocadas en ganar un margen sobre nuevos productos, sino que están más interesadas en garantizar la seguridad y la seguridad social, la educación y el bienestar, así como la búsqueda de la gran aventura del ser humano”.

Segundo, la innovación “siempre involucra un propósito que cobra vida cuando nos centramos en lo que queremos”. Tercero, vivimos en un nuevo entorno en donde los sistemas tradicionales y los modelos de gobernabilidad son constantemente puestos bajo evaluación, y en donde “la única manera de que se pueda ir desde hoy hasta un futuro deseable es por medio de la innovación, con lo cual entendemos cambiar el modo en que hacemos las cosas, cambiar los productos y servicios que comercializamos, y cambiar nuestra percepción del mundo, todo ello con la mirada puesta en un cierto sentido de lo que queremos lograr”.

En esencia, en el universo Spa tiene que orientarse más al cliente y ser más sensible a sus necesidades, porque el mercado los obligará inevitablemente a ser más “innovaSPAdor”.